El jugador cántabro Manuel Ballesteros, sobrino del legendario Seve Ballesteros, logró imponerse sobre el madrileño Sebastián García Rodríguez en el hoyo de desempate de un apasionante final del XXX Campeonato de la PGA de España, prueba puntuable para el Ránking del circuito nacional Gambito Golf Tour 2017, disputada en el Club de Golf Riocerezo, en Burgos.
Iván Cantero, Jacobo Pastor, Luis Claverie y Santiago Tarrío terminaron en tercera posición. Manu une su nombre en el mismo historial que Seve, ganador dicho campeonato en sus ediciones de 1987 y 1988.
Manuel Ballesteros ha logrado así su primer título profesional a nivel nacional en el primer hoyo de play-off ante Sebastián García Rodríguez, después de terminar esta tercera ronda empatados a -7. Es la primera vez que el apellido de Ballesteros vuelve a estar en lo más alto de un torneo, y el primer triunfo a nivel profesional importante en el que un Ballesteros levanta una copa desde que Seve ganara el Royal Trophy 2007. Previamente, Javier Ballesteros ganaba en 2012 el Campeonato Abierto de Madrid Amateur Masculino en Retamares, y Manuel un torneo del Circuito Montañés en 2013.
Además, Manuel ya ha demostrado su buen juego en el Gambito Golf Tour de este año, con el puesto 5º en el Laura Biagiotti Parfums Open, celebrado en el Marco Simone Golf & Country Club de Roma; y el 13º en el Gran Premio Meliá Hacienda del Conde de Buenavista Golf, en Tenerife, por lo que este triunfo le va a permitir ascender unas cuantas posiciones en el Ránking del Orden de Mérito del circuito nacional.
“Nunca había ganado a nivel nacional y estoy muy contento. He jugado muy bien toda la semana, pegando buenos drives y pateando muy bien. El último putt me he sorprendido a mí mismo porque estaba, incluso, demasiado tranquilo, cuando lo normal es que estuviera temblando. La mala suerte la ha tenido Sebastián, que se le ha quedado la bola hundida en el búnker y he aprovechado mi oportunidad. En Pedreña lo celebraré con mis padres y amigos”, decía Manuel Ballesteros al final del campeonato.
No se pudo pedir más emoción en esta edición especial del Campeonato de la PGA de España, que cumplía su trigésima edición. Por primera vez en su historia el torneo se trasladaba a Burgos, al campo público de Riocerezo, donde un centenar de jugadores aspiraban a la corona. Pero fue Manuel Ballesteros, líder desde el primer día, quien logró imponer su ley en un torneo duro por la climatología de los dos primeros días, con frío y viento y brutal caída de las temperaturas, y por el altísimo nivel de los competidores.
La última jornada deparaba emoción desde el minuto uno, cuando grandes nombres del panorama nacional iban tomando posiciones en la tabla. Jacobo Pastor, multiganador esta temporada en el Circuito de Madrid y el Circuito Nacional Gambito Golf Tour, ascendía posiciones con ganas de victoria; lo mismo que Sebastián García Rodríguez, con seis triunfos en los que va de año; o Iván Cantero, que a principio de semana se le escapaba en play-off el título de Campeón de Asturias en favor de Alfredo García Heredia.
Pero el que saltó a los titulares el primer día fue Manuel Ballesteros, sobrino de Severiano, colocándose de líder y manteniendo esa posición hasta el hoyo 17 de la última ronda en Riocerezo. “No he cumplido mis propósitos y he salido como una moto; muy nervioso. Creo que me ha costado nueve hoyos tranquilizarme”, comentaba Manuel Ballesteros sobre su tercera vuelta y antes de que le cayera una lluvia de cava de la mano de sus primos Javier Ballesteros y el hermano de éste, Miguel Ballesteros, que le ha hecho de caddie.
No lo tuvo fácil Manuel, que comenzaba el día con tres birdies en los seis primeros hoyos y se colocaba con 5 golpes de ventaja sobre el segundo, que en ese momento era Jacobo Pastor. Parecía que el torneo se le ponía de cara al cántabro. Pero los nervios se le tensaron en el 17, el hoyo del green en isla que, como bien dijo Ander Martínez, gerente del club, a principios de la semana: “A más de uno se le va a atragantar. Ese será el hoyo que va a marcar la diferencia”. Y así ha sido.
Manuel tuvo una escapada con el drive y terminó con tres putts y un doble bogey que igualaba las cosas en el marcador. En el 18 tuvo un putt de poco más de dos metros para ganar el torneo, que pasó muy cerca del hoyo. Mientras Sebastián García Rodríguez, que hizo un vueltón de 66 golpes acabando con dos eagles, esperaba en su oportunidad en la casa club.
PLAY-OFF ‘MADE IN SEVE’
El play-off estaba servido. Se decidió jugar sobre el hoyo 9, un par 5 relativamente sencillo y con un green receptivo donde esperaban casi un centenar de personas, entre ellos, algunos miembros de la familia Ballesteros-Botín, que se habían acercado desde Madrid y Santander.
Sebastián, con un buen drive, la dejó en mitad de la calle, y Manuel se fue a la izquierda del hoyo. En el segundo golpe, el madrileño cayó en el búnker de la izquierda de green con tan mala suerte de que la bola quedó hundida. Manuel, en un grandísimo golpe de recuperación, dejo la bola antes del búnker.
Con los nervios a flor de piel, en un chipp de esos que ganan un Major, Manuel acercó la bola al hoyo, mientras que el madrileño no pudo sacarla de la trampa de arena a la primera. El putt del jugador cántabro bastó para lograr su primer triunfo a nivel nacional, en un torneo con historia, que ya ganó su tío hace 30 años.
Fotos: ©Carlos Rodríguez